Por Mónica Delgado
Germania es el primer largometraje del argentino Maximiliano Schonfeld y describe el último día de dos hermanos adolescentes, Lucas y Brenda, en una pequeña aldea de migrantes alemanes ubicada en Entre Ríos, provincia argentina. Se les ve en una rutina de trabajo y de ocio, con amigos y vecinos, antes de mudarse y abandonar la casa donde viven junto a su madre. Intentan vender la granja y los animales, pero rumores entre los pueblerinos de una peste, mala suerte y castigo divino sobre ellos (el padre acaba de morir), evitan que logren resultados más positivos.
Scholfeld insufla a su filme de una atmósfera seca, de diálogos lentos en dialecto alemán (idioma original de los actores no profesionales), que produce la sensación de distanciamiento, deshaciendo cualquier relación geopolítica con el Entre Ríos y trazando un nuevo espacio rural, con sus propias características y modos de vivir. Si en Luz Silenciosa (Stellet Licht), Carlos Reygadas propone adentrarnos en el corazón de una familia menonita al norte de México, donde todos los diálogos son en su lengua natal (la variante alemán bajo menonita), en Germania, el cineasta deja a sus personajes comunicarse en algún dilecto del Volta, como si se tratara de un intento por aferrarse sin mucha fuerza a una cultura que está por acabar. En una escena, Brenda le dice a su hermano, que deje de hablar en dialecto, para dar paso al español, que suelen usar de vez en cuando (sobre todo cuando están los jóvenes solos con sus amigos).
Pero el filme de Scholfeld no es el relato de la pérdida de la inocencia, ni del despertar sexual, ni de la asimilación cultural en una tierra lejana. Es la construcción de una serie de pistas sobre relaciones familiares endebles, distorsionadas, que rozan el tabú, y que el cineasta traduce en un contexto áspero donde ubica a sus personajes: un espacio familiar que apenas aparece y que nada se disfruta, una granja llena de gallinas con peste, campos agrestes donde se arrastran vacas muertas, o fiestas en medio de la desazón mientras suena una polka. Germania es una interesante ópera prima, tanto por la apuesta de darle al espacio la dimensión de aquello que carcome el interior de los personajes: un drama físico, lleno de sugerencias.
Director: Maximiliano Schonfeld
Guión: Maximiliano Schonfeld, Rafael Cardelli
Productores: Fernando Brom, Bárbara Francisco, Maximiliano Schonfeld
Cinematografía: Soledad Rodriguez
Protagonistas: Margarita Greifenstein, Brenda Krutli, Lucas Schell
Argentina
75 mins
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