Por Mónica Delgado

Presentada en la nueva sección Encounters del reciente Festival Internacional de Cine de Berlín, Isabella mantiene la continuidad de los films realizados por Matías Piñeiro sobre personajes femeninos en algunas obras de William Shakespeare. Hay bastante déjà vu en este nuevo film en la vuelta a las formas elegidas por el cineasta argentino para abordar las diversas relaciones entre lo literario, teatral o dramático, en el sentido escénico, con la representación cinematográfica, desde las idas y venidas en la cotidianidad de actrices ante retos interpretativos.

Isabella, como el nombre del film, es uno de los personajes de la obra Medida por medida de Shakespeare, una comedia sexual satírica, y cuyo rol es el sueño de Mariel (María Villar), la protagonista (y parte de las actrices fetiche en estas obras piñeiranas), quiene tiene un alter ego o mímesis de éxito, Luciana (encarnada por Agustina Muñoz). Ambas, de acuerdo a sus aspiraciones personales, oscilan alrededor del personaje de Isabella, que luce como una entelequia, para una, inalcanzable, y para otra, un papel como cualquier otro.

Si bien Isabella se mantiene en línea estética con los anteriores trabajos de Matías Piñeiro (La princesa de Francia, Viola o Hermia & Helena), el cineasta establece una sutil diferencia quizás más conceptual, y que tiene que ver con cómo presenta ese tipo de teatro o dramatización que Mariel asume como parte de su carrera futura, al liderar un proyecto escénico de cariz vanguardista. Y este deseo, que conocemos a través de fast forward y desde una ensoñación que se muestra con tonalidades púrpuras, de alcanzar a  Isabella, ese personaje soñado y que cada vez se aleja más, se va concretando pero a partir de este tratamiento visual, que confirma la capacidad de decisión del personaje de Mariel. Es decir, ella atrapa este clima de la tonalidad morada cuando se afirma a ella misma.

Isabella tiene todos esos elementos que han delineado y afinado el cine de Matías Piñeiro. Aparecen los juegos temporales, las variaciones como marcas, los diálogos lúdicos, las preferencias rohmerianas o rivettianas en la relación de dos personajes entre sí, y la dirección de espléndidas actrices. Sin embargo, pese a estas conjunciones, en este nuevo trabajo encontramos quizás una síntesis, o un estado menos barroco de la interpretación de una obra poco conocida de Shakespeare. Es decir, es una muestra de cómo Piñeiro trata de empatar el lado cómico de esta aparente comedia sexual, desde lo literario, y extrapolarlo al universo visual de Mariel. Una tarea compleja resuelta desde la calidez de unos púrpuras magníficos (la fotografía de Fernando Lockett), como sinónimo del encuentro y la satisfacción entre las dos mujeres, a pesar de no haberse cumplido el deseo de interpretar el rol soñado.

Encounters
Dirección y guion: Matías Piñeiro
Fotografía: Fernando Lockett
Edición: Sebastián Schjaer
Música: Gabi Saidón, Santi Grandone
Diseño de sonido: Mercedes Tennina
Diseño de producción: Ana Cambre
Vestuario: Ana Cambre
Productora: Melanie Schapiro
Co-producción: Le Fresnoy – Studio national des arts contemporains, Tourcoing
Reparto: María Villar, Agustina Muñoz, Pablo Sigal, Gabi Saidon
Argentina, Francia, 2020, 80 min