Por Nicolás Carrasco
Un hotel de dos estrellas en París parece haberse quedado en los años 70. ¿En que época nos encontramos? Las manifestaciones en las calles fuera del hotel parecen remitir, más que a un lejano mayo del 68, a la situación actual de crisis europea. De noche y durante estas revueltas, una pareja italiana y homosexual llegará al hotel Occidental, microcosmos que representará esa noche a toda Europa y donde transcurre casi la totalidad de la película.
A partir que los recién llegados piden en recepción una habitación matrimonial, la administradora del hotel empieza a sospechar inmediatamente y llama a la policía, a pesar de no tener ninguna evidencia contra ellos. Sus razones van desde el coqueteo de uno de ellos (Paul Hamy de El Ornitólogo) con la recepcionista, hasta el gusto por la Coca-Cola del otro (“los italianos no toman Coca-Cola”, le dice a la policía), entre otras situaciones absurdas que ponen en evidencia los prejuicios de los empleados del hotel, los policías y los huéspedes.
El gran acierto del segundo largometraje de Neïl Beloufa está en saber representar el absurdo de estos comportamientos homofóbicos, racistas y xenofóbicos en una sociedad donde nadie se considera ni homofóbico, ni racista ni xenófobo, y sin caer en la caricatura facilista de “minorías-buenas” y “franceses-malos”. Parte de la riqueza que tienen los “italianos” Giorgio y su pareja radica en su comportamiento misterioso y sensual, en su ambigüedad sexual y política. ¿Son realmente culpables de lo que se les acusa? ¿Son ladrones o terroristas escondidos en el hotel? ¿Son realmente gays? ¿Son si quiera italianos o es todo una farsa?
En su cortometraje Kempinski (2007) Beloufa se preguntaba por el futuro para interrogar el presente, entrecruzando realidad y fantasía, documental y ciencia ficción. Occidental, en cambio, se pregunta por el pasado, con esos decorados y vestuarios tan estilizados que recuerdan a Fassbinder y con situaciones que remiten a distintos géneros como el cine negro, la comedia de situaciones, el romance y el thriller. Y como Fassbinder, Beloufa busca, a través del artificio, analizar la complejidad de la moral burguesa actual y hacernos ver con mayor claridad las condiciones sociales y políticas de la Europa de nuestro tiempo.
Wavelengths
Guion y dirección: Neïl Beloufa
Fotografía: Guillaume Le Grontec
Editor: Ermanno Corrado
Música: Grégoire Bourdeil, Alexandre Geindre
Diseño de sonido: Arno Ledoux
Sonido: Arno Ledoux, François Bailly
Diseño de producción: Dan Perez
Productores: Jacques Dodart, Bad Manners, Hugo Jeuffrault, Bad Manners, Pierre Malachin, Bad Manners
Reparto: Idir Chender, Anna Ivacheff, Paul Hamy, Louise Orry-Diquero, Hamza Meziani, Brahim Tekfa
Francia, 2017