Por Mónica Delgado
El mar nos mira de lejos es una sorpresa en la Berlinale. Sobre todo porque en estos primeros días el festival se pobló de films irregulares, que incluyen en su metraje buenos momentos, estallidos, ideas lúcidas pero no en la medida en que el cineasta sevillano Manuel Muñoz Rivas capta un tipo de realidad de cinematográfica conocida, sí, pero aquí muy concreta y humana. No hay nada en El mar nos mira de lejos que no remita al documental independiente español actual: fascinación por el rescate de un espacio olvidado por el tiempo, personajes descubiertos en su cotidianidad, un afán observacional para sumergirnos en la dimensión pesada del tiempo, y un estilo documental con visos ficcionales. Sin embargo, este primer filme de Manuel Muñoz Rivas, habitual colaborador de Mauro Herce (Dead Slow Ahead), quien también trabaja en el guión y la fotografía, apuesta por otras formas de sensibilidad en el registro del paisaje y personajes, en este caso un área nacional protegida, en las costas del sureste de España, que aún mantiene en sus terrenos a pobladores que viven de la pesca.
En El mar nos mira de lejos, Muñoz Rivas propone partir de un concepto, en este caso histórico, que poco a poco se va uniendo al imaginario fantástico del film: la llegada de exploradores en el siglo XVII en busca de los restos de Tartesso, una suerte de ciudad mítica, de ascendencia fenicia, como la Atlántida, y que nos son narrados por una voz en off de un español muy castizo. Esta voz, que irrumpirá unas tres veces en el relato, permitirá la asociación de este registro de lo real con un pasado aún pendiente, pero asociado a otro tipo de búsqueda en estas costas.
El valor de un film como este reside en su capacidad de entablar diversas correspondencias que van enriqueciendo la propuesta general: pequeños subrelatos que se abren a partir de los personajes, pescadores y jubilados solitarios, la inclusión de fotografías que van describiendo un tiempo perdido, la observación de los arenales, las visitas de los turistas, y la sensación de que este entorno natural atrapa y engülle a sus habitantes. Y sobre todo la relación de esta Tartesso buscada como joya, y la posibilidad de que su entierro se homologue a otros posibles pequeños Tartessos que parecen ir asomando, a partir de recuerdos, vestigios o mapas.
Muñoz Rivas muestra en este film esa capacidad para provocar diversas lecturas, desde la soledad de los personajes ermitaños, desde la arena que se mete a la fuerza a las pequeñas casas que existen en esta zona protegida, y desde el mar enorme y ruidoso que está allí cerca pero casi distante. El mar nos mira desde lejos es en realidad una ficción, o una interpretación sobre el silencio de algunas resistencias, narradas bajo el ritmo del viento que lo va enterrando todo. Y ante todo, una estricta experiencia cinemática.
Forum
Director: Manuel Muñoz Rivas
Guión: Manuel Muñoz Rivas, Mauro Herce
Fotografía: Mauro Herce
Editor: Cristóbal Fernández, Manuel Muñoz Rivas, Pablo Gil Rituerto
Diseño de sonido: Jeroen Goeijers, Manuel Muñoz Rivas
Sonido:Joaquín Pachón
Productores: José M. Rodríguez Calvo, Sara Sánchez García, José Alayón Dévora, Rosan Boersma, Denis Wigman, Irene M. Borrego
España, Holanda, 2017