CINÉMA DU RÉEL 2021: DOS PELÍCULAS DE CLAIRE SIMON Y NICOLAS KLOTZ / ELIZABETH PERCEVAL

CINÉMA DU RÉEL 2021: DOS PELÍCULAS DE CLAIRE SIMON Y NICOLAS KLOTZ / ELIZABETH PERCEVAL

Por José Sarmiento Hinojosa

Claire Simon (Gare du Nord, 2013) ha estado viviendo dentro de su propio documental personal durante años. “La gente suena verdadera o falsa tanto en el cine de ficción como en el cine documental”. Aquí, se embarca en un pequeño pueblo de La Provenza, donde un grupo de hombres dirige un negocio de garaje. El principal interés de esta mirada es visibilizar el aparato patriarcal que funciona en cualquier ciudad de provincia, pero no en tono de denuncia, sino para desnudar el sistema para que el espectador pueda ver cómo este ambiente tan “masculino” de trabajadores funciona con sus propias reglas, y también sujeto a ciertos mecanismos de poder. El lado revelador de este Garage, Engines and Men, reside en la cuidada manera en que Simon coloca su propia cámara/cuerpo en medio de las rutinas diarias de esta dinámica de camaradería masculina, un lugar de empatía que muestra a este hombre en toda su dimensión, con sus imperfecciones y claro sexismo heredado, pero también como panorama de los días de los trabajadores, con familias, que intentan mantenerse con su vida laboral.

Por lo tanto, uno nunca se opone a los personajes de la película. Está bastante claro que los mecanismos del sexismo y las estructuras patriarcales están ahí para ser observados (con cosas simples, como el tono de llamada del padrino del dueño de la tienda, las disputas y conflictos entre hombres, el diálogo condescendiente con las mujeres sobre la familia y los niños, incluso algunos momentos tensos de intensa discusión entre ex amantes). Pero Simon coloca su mirada en un lugar de comprensión que nunca excusa las actitudes de estos hombres, sino que simplemente los muestra como son y nos permite tomar nuestra propia posición personal frente a estos temas complejos. Es un ejercicio de observación. Se podría afirmar que la presencia no es suficiente, que se debe tomar cierta posición ante estos temas, pero este documental no es un ejercicio de disrupción sino una oportunidad de contemplar los problemas que surgen dentro de un sistema que mantiene a los hombres en ciertos estándares de conducta y ciertos conflictos de carácter.

Garage, Engines and Men también se siente bastante “provinciano” en su tratamiento, y de alguna manera gravita en torno a este universo de gente europea de pueblos pequeños, que es interesante de ver, pero no llega a ser más incisivo en ciertos aspectos estructurales de la hombría y clase obrera. Aún así, un documental interesante para ver.

En el otro lado del espectro, tenemos Saxifrages, Four White Nights de Nicolas Klotz y Elizabeth Perceval, una película que trabaja dentro de esta atmósfera de “romanticismo gótico” (no es mi término, sino el de Clémence Arrivé y Catherine Bizern). La obra se abre con un poema del poeta surrealista René Char, y de inmediato nos arrastra a un limbo de atmósferas oscuras que invoca los espíritus de Straub-Hulliet, Bresson y Costa. «A las sombras de Low Life, ceremonia secreta dedicada a trece guardianes de los tesoros comunes de la humanidad, el amor y la resistencia, la juventud y la poesía, la igualdad y la diferencia, la insurrección y la revolución», explica la introducción de la película para Cinéma du Réel y es, sin duda, el punto de partida de este deambular por una no zona de personajes diferentes, que enuncian sus monólogos como muertos vivientes que habitan un determinado círculo del infierno.

Klotz y Perceval son nuevos en esta forma laberíntica de colocar a sus personajes en un no espacio. Películas como Mata Atlántica (2016), Low Life (2011) o La Blessure (2004) de Klotz, entre otras, tratan estos espacios habitados por los marginados, el artista, las minorías: el otro. Este ejercicio de denuncia es increíblemente poderoso, porque llega a un lugar neurálgico de nacimiento que se relaciona con el arte como forma de sobrevivir, de existir en un lugar contra viento y marea, de declarar la vida como mero acto de resistencia, de la poesía como acción política. Los personajes de Klotz y Perceval no viven como habitantes de un infierno dantesco, sino como ángeles oscuros que se han rebelado contra la designación de alguien más grande que ellos. Ángeles caídos que hablan e interactúan con la poesía como último recurso de supervivencia.

Un híbrido de ficción y documental, Saxifrages, Four White Nights cimenta la posición de Klotz y Perceval como dos de los cineastas políticos más extraordinarios de la década de 2000. Sus saxífragas, que poco a poco van rompiendo el tejido social, son el punto fundamental donde comienza su cine: la humanidad en resistencia. El destino de estas plantas desarraigadas, las saxífragas, es una suave perseverancia duplicada por una imperceptible intransigencia, que, con el tiempo, impone a la dureza de las piedras una paciencia que las puede romper.