Por Pablo Gamba

Frankie es un film rodado en Santa Fe, capital de la provincia argentina del mismo nombre. Es una ciudad que fue filmada desde el aire y descrita de manera irónicamente minuciosa, con absurdas estadísticas, en la película fundadora del documental testimonial del nuevo cine latinoamericano: Tire dié (1962), dirigido por Fernando Birri y realizado por alumnos de la escuela de documentalismo que fundó en Santa Fe, en la Universidad del Litoral.

La ópera prima de Betania Cappato, producida por el director de Touleblanc (Argentina, 2017), Iván Fund, viene a ser el contraplano de Tire dié. Los tres personajes principales de Frankie son santafecinos que tienen una parte de sí volcada hacia lo alto, desde donde se veía la ciudad en esa otra película, y que por esa razón orbitan en torno a un viejo centro de observación astronómica.

Diversos meteoritos y modelos a escala, entre ellos el de uno de los cohetes con que la Argentina también quiso lanzarse a la conquista del espacio, son algunos de los tesoros que guarda ese lugar. También libros y folletos sobre los cuerpos celestes, y las infaltables fotos del programa lunar de Estados Unidos.

El viejo García es un custodio de la colección. Tiene 88 años, y su barba y cabello blancos parecen parte de la puesta en escena. Noelia es una joven a la que alguna fuerza cósmica, o de la economía local, ha llevado a ser parte de ese lugar, en el que quizás encontró su primer empleo. El papel del aficionado recae en Marcelo, quien en una escena muestra sus destrezas en el manejo del telescopio. Frankie, que también figura en los créditos, podría ser uno de los dos gatitos que andan por el lugar, quizás el de los ojos curiosos, muy abiertos.

Da la impresión de que no pasa nada en este documental, cuyo minimalismo y silencios lo hacen parecer un tierno revival del viejo nuevo cine argentino de los noventa –o al menos una respuesta a la misantropía de la mirada a la provincia en El ciudadano ilustre (2017), de Mariano Cohn y Gastón Duprat–. Pero sí pasa algo: el tiempo, que es su verdadero protagonista, y que está vinculado con el movimiento de los cuerpos celestes y de los habitantes de la ciudad. En Frankie no solo se contempla esa relación de lo pequeño con lo inmenso, sino que también se la estudia a través del uso combinado del time lapse y la música.

Hay una escena en que Noelia le dice al viejo García que ella no tiene problemas. Sin embargo, hay una pregunta que esta película deja en el aire: ¿qué habrá sido de los muchachitos que corrían junto a las vías del tren, pidiendo limosna a los pasajeros, en el contraplano terrenal de Tire Dié?

Sección: La Cercanía de lo Real
Frankie
Dirección: Betania Cappato
Guion y montaje: Betania Cappato, Iván Fund
Producción: Gisel Bugliolo
Fotografía: Iván Fund
Sonido: Betania Cappato, Leandro de Loredo