Por Ivonne Sheen
De noche, afuera, sin corriente eléctrica, con cansancio del abandono, cuerpos, personas a la espera de una vida mejor. Un limbo que intentan alumbrar con luces provisionales, sin la estabilidad del bienestar que esperan del gobierno. Nelson Makengo (nacido en 1990) retrata a un grupo en la comunidad de Kinshasa, en el Congo, ciudad de origen del director, y explora las posibilidades del formato audiovisual digital para extender la expresión metafórica de Up at night (2019) más allá del contenido temático documental.
La película se presenta como una pieza audiovisual de tres canales, creando un mosaico de las mismas imágenes e intermitentemente creando sintaxis entre imágenes diversas del mismo contexto. El tiempo se suspende y entramos en un ritmo cíclico, de una vigilia pesimista en la que generaciones mayores y jóvenes denuncian el abandono del gobierno al dejarlos sin corriente eléctrica. Makengo se acerca a ellos con sutileza y silencio, su presencia es evidente; sin embargo, las personas se desenvuelven con confianza y asumen la oportunidad de que sus voces se puedan oír más allá de su barrio. El seguimiento evidencia las alternativas que se buscan constantemente para lidiar con la carencia. Desde usar lámparas led hasta generar luz con combustible. Esta rutina nos marca un tempo casi circular como si la noche empezara y terminara al mismo tiempo, como una serpiente que se muerde la cola. El día no existe. El bien de la electricidad trasciende la iluminación e involucran muchas posibilidades mínimas de subsistencia, en este sentido, la decisión del retrato nocturno denota la empatía y preocupación del director por acercarnos a la difícil realidad que retrata, valiéndose de su sensibilidad estilizada.
Se crea una sensación de insomnio, de agotamiento, de una vigilia indefinida y desoladora. Una mujer sostiene con sus manos un cable grueso de electricidad de alta tensión, mientras denuncia: “mis nietos ya no pueden ver televisión”. Situación simbólica en términos de la modernidad, de un ocio común entre las sociedades urbanizadas, y probablemente también de populismo y consumismo. La ausencia de electricidad los afecta en sus derechos básicos y de ocio, se le ha negado una vida digna, de libre decisión. Makengo compone imagen y sonido de manera paralela, creando momentos de dislocación que abren la posibilidad de aproximación a las múltiples capas que significan la condición en la que viven. Además de las voces de las personas retratadas, también oímos a los gobernantes con promesas y dando sermones a la comunidad. Mientras la cámara viaja entre rostros y espacios, entre cables y colores, se crea el paisaje híbrido de una realidad compleja, caracterizada por el abandono, un paisaje que los espectadores podemos habitar por unos minutos, y acercarnos a la pena que ya habita en las personas de Kinshasa, y que se manifiesta y retro alimenta como oscuridad circular.
Up at night (2019) es una película documental y también un videoarte (tal vez instalativo), es una pieza artística que aprovecha las posibilidades del estilo para crear una experiencia atmosférica y testimonial, que nos acerca intuitivamente y afectivamente a los problemas políticos que denuncia.
Título original: Nuit Debout
Director: Nelson Makengo
Productor: Rosa Spaliviero (Twenty-Nine Studio et Production)
País: Democratic Republic of Congo Belgium
Año: 2019
Duración 21 min