FESTIVAL DE LIMA 2013: HELI DE AMAT ESCALANTE

FESTIVAL DE LIMA 2013: HELI DE AMAT ESCALANTE

Por Mónica Delgado

Heli de Amat Escalante describe el proceso de una alineación en un contexto de narcotráfico sin narcos pero sí lleno de militares corruptos, sicarios embrutecidos y detectives aburridos. El cineasta escoge el entorno de una familia pobre de algún poblado rural mexicano, liderada por Heli, un joven padre de veinte años que vive con su esposa, su bebé, padre y hermana, para desgranar un relato sobre la convivencia de la violencia, sobre cómo esta trastoca la tranquilidad a punta de tiros.

Como en las anteriores películas de Escalante, se apuesta por situaciones extremas y por colocar a un antihéroe como víctima social. Sin embargo, aquí el pulso de Amat está mejor definido: no se trata de mostrar un retrato social, una interpretación de los efectos de la violencia y terror a causa de la problemática del narcotráfico en México, lo que sería más simple, sino que el cineasta añade otras motivaciones que extraen incluso el contexto para traducirlo en una «introspección» sobre el camino recobrado hacia la normalidad. Para los personajes de Heli,  que parten de situaciones familiares cotidianas que implican el trabajo, las labores caseras, la crianza del hijo y la rutina escolar, van a ir «ordenando» un nuevo espacio familiar, una nueva configuración desde la tragedia y su aceptación. Heli y su esposa no pueden tener relaciones sexuales tras el nacimiento de su hijo, la mujer se rehusa, escapa (basta recordar la segunda escena de la película de juego amoroso entre la pareja como punto de partida), sin embargo, tras la irrupción del terror, la tortura y la vejación, el deseo sexual va a ir apareciendo. Pero no se percibe como un acto forzado o retórico, sino más bien como metáfora de esa alineación o una falsa normalidad ante el pasado.

En Heli, Escalante se apodera de los panorámicos para mostrar el paisaje seco y silencioso, que cobija regodeos amorosos pero también secuestros y muertes. El espacio abierto es también el lugar de nadie, donde el soldado lleva a su novia de doce años a dar paseos, donde los militares esconden la droga, o donde Heli transita cada atardecer para llegar a la fábrica donde trabaja. Como en el western, el paisaje se vuelve testigo de la impasividad y de la agresión del intruso.

Heli es la película más interesante de Escalante, a pesar de toda una controversia por la escena de la tortura, porque ha sabido transgredir la intención de «denuncia» o de radiografía que tiene Los bastardos sobre el tema de la migración, por ejemplo, tema tan caro al cine mexicano reciente como lo es el narcotráfico, para ir hacia una historia con más brío y aristas, con detalles de lo nonsense o amago de «real maravilloso», como el muchacho de botas punteagudas que pregunta por Durango en alguna escena o la vaca en el hoyo.

Competencia Internacional de Ficción
Título: Heli
Director: Amat Escalante
País: México
Año: 2013
Reparto: Armando Espitia, Andrea Vergara, entre otros.