VALDIVIA 2017: MILLA DE VALÉRIE MASSADIAN

VALDIVIA 2017: MILLA DE VALÉRIE MASSADIAN

Por Mónica Delgado

Milla es el reverso de Nana, el anterior largometraje de Valérie Massadian. Si en Nana una niña de cuatro años lidia en su inocencia con el mundo con independencia y agencia poco usual, en Milla, una adolescente de 17 años vive en función de su novio, ambos sin nada más que hacer que vivir como ocupas, sin trabajo y dinero en una zona portuaria de Francia. Esta dependencia emocional es narrada por la cineasta desde la observación de diversos actos cotidianos, que permiten poco a poco crear el retrato de esta protagonista (encarnada por Severine Jonckeere), tanto desde su relación con su novio Leo (Luc Chessel) como con la llegada de la maternidad.

Massadian plantea al personaje de Milla en función de la presencia y ausencia de Leo, quien trabaja y mantiene el nuevo hogar. Es a través de él que la protagonista vivirá diversas pruebas, mostrando claramente un antes y un después en su vida, pero siempre en virtud de la presencia o ausencia de dos personajes centrales, que la dibujan y sostienen. Milla no existe sin esta posibilidad, y es mostrada como pivote no del devenir o de hechos infaustos, sino de la voluntad de aquello que aparece en su vida, ante lo cual solo queda resistir o dejarse llevar.

Si bien Massadian elige un estilo que busca captar los tiempos de lo cotidiano (Milla en tareas caseras o simples), hay espacio para la irrupción de lo fantástico, a partir de una canción que permite liberar lo que el personaje mantiene oculto o en reserva. Por ello, no es causal que en Milla no se vean besos o relaciones sexuales, ya que hay un espacio para la contención o la elipsis que sugiere un tipo de distancia-o pequeñas resistencias- que mueve el espíritu de los personajes, para ceder luego a otro tipo de representaciones de afecto filial.

En la segunda parte se percibe un efecto acumulativo, al dilatar diversas escenas que buscan graficar la nueva fase en la vida de Milla, lo que enfatiza las irregularidades en esta apuesta de Massadian. La cineasta prolonga el estilo de Nana y propone una puesta de planos fijos con una cuidada fotografía (el plano inicial es notable), y en Milla se afirma como retratista femenina en una Francia abstraída, pese al toque dardenniano sobre la crisis social, que irrumpe de modo impostado (sobre todo por algunos diálogos claros sobre el sistema de subsidios y el empleo) en medio de un clima de certeros toques fantásticos.

Competencia Internacional de Largometrajes

Dirección: Valérie Massadian
Guion: Valérie Massadian
Producción: Gaijin / Cinémadefacto
Fotografía: Mel Massadian, Robin Fresson
Reparto: Severine Jonckeere, Luc Chessel, Ethan Jonckeere
Francia, 2017, 128 min