Por Alonso Castro
En el CPH-DOX 2018, dentro de la sección Artists and auteurs, se exhibió 13, a Ludodrama about Walter Benjamin de Carlos Ferrand. Se trata de una película, dividida en 13 capítulos, que documenta la vida del filósofo alemán Walter Benjamin durante su exilio en Francia, en el periodo entre 1933 y 1940.
Antes de comenzar con la crítica a la película de Ferrand, quizás convendría mencionar información clave para conocer a Walter Benjamin. Su trabajo estuvo muy vinculado con la Escuela de Frankfurt, sin llegar a ser parte de dicha corriente filosófica. Asimismo, se enfocó en reflexionar y escribir sobre temas afines a la teoría estética, crítica literaria y ensayo sobre la violencia y la historia, teniendo como bases al materialismo histórico, el marxismo, el misticismo judío y el idealismo alemán.
Después de ello, como punto de partida, se puede decir que la película de Ferrand no solo nos cuenta algunos episodios de la vida de Benjamin durante el periodo de su exilio en París. También nos aproxima, de manera sugerente, introductoria y concisa, a algunas líneas de pensamiento del filósofo: se dejan apuntadas las reflexiones en torno al vínculo entre historia y violencia, a la (re)producción/ reproductibilidad del arte en la modernidad de inicios del novecientos, la vida cotidiana en la ciudad (haciendo énfasis en la existencia de las galerías o pasajes comerciales de París de fines del 1800 e inicios del 1900), entre otros tópicos.
Sin embargo, la película no es solo un documental que cuente algunos hechos en la vida de Benjamin, sino que lúdicamente nos acerca sus conflictos internos y reflexiones sobre la modernidad capitalista del periodo previo a la segunda guerra. A través del uso de documentos de archivo y fotografías del filósofo y otros personajes, found footage y animaciones, la película revive pasajes temporales de los últimos años del filósofo alemán y también del contexto de Europa antes de que inicie la segunda guerra mundial. Se reconstruye así no solo pasajes históricos de Europa y la vida de Benjamin hacia fines de la década de 1930 desde una propuesta más objetiva bajo las formas del documental más clásico; sino que Ferrand, valiéndose de algunas ideas del filósofo y reordenándolas arbitrariamente, propone ciertas reflexiones sobre el capitalismo y su carácter autodestructivo (basándose en la lectura del autor alemán sobre la pintura Angelus Novus de Paul Klee, por ejemplo), el potencial de las artes bajo la reproducción mecánica para emancipar a la humanidad, entre otros tópicos.
De esa manera, la película no solo documenta, sino que propone y plantea reflexiones, adquiriendo matices características del cine de ensayo. Por eso, se puede afirmar que 13, a Ludodrama about Walter Benjamin es más que un recuento de hechos anecdóticos o fundamentales en la vida de Benjamin y del contexto social, cultural, político y económico de Europa antes de la expansión del nazismo dentro del continente.
La película nos acerca a un personaje cuya imagen es retratada con cuidado y respeto, al punto de convencer –o al menos de generar cierta curiosidad- al espectador de que aproximarse a un filósofo como Benjamin puede ser enriquecedor en varios aspectos. Podría decirse que el propósito del filme, en última instancia, es un homenaje a Walter Benjamin, que logra esquivar una representación superficial, sosa y solemne y se acerca, más bien, a lo lúdico como si la película fuera en sí misma una caja de juguetes al que el espectador puede acercarse para escoger con cual empezar el juego.
Director: Carlos Ferrand
Canadá
2017
78 min