Por Mónica Delgado
Más allá de los impactantes planos bajo el influjo de la fotografía de Nicolas Karakatsanis, Violet de Bas Devos ahonda en los indicios, claves, detalles del dolor reprimido en un adolescente de quince años, testigo del asesinato de su mejor amigo. A diferencia del cine de Gus van Sant, inevitable mencionarlo, enfatizando que existe una clara distancia estilística, Devos se centra en la descripción de un dolor interior a partir de pequeñas pistas clavadas en el entorno, como insistiendo en la necesidad de que el espectador vaya desgranando el nivel del duelo de este adolescente desde el fuera de campo o el simple gesto perdido en un panorámico. Las pocas palabras que se dicen en el filme están elegidas casi matemáticamente, como frases exactas y definitivas de la duda, acusación o indiferencia ante el rostro cansado de Jesse (César de Sutter), quien soporta ser el único testigo del crimen de su amigo por parte de otros adolescentes en un centro comercial.
Violet (Bélgica, Holanda, 2013) tiene un planteamiento visual que busca abstraer lo real para subvertirlo a la medida del recuerdo o percepción de su protagonista. El crimen del amigo es visto a través de una serie de cámaras de seguridad, y las salidas con los amigos que practican BMX en bosques y rampas es percibida desde lo poético o desde una sublimación de grupo en planos que fragmentan las acciones.
Devos ha elegido una puesta en escena libre de virtuosismo, apostando más por planos fijos o planos secuencias que quieren traducir el estado de pérdida y del estadio de sensibilidad adolescente en un suburbio de Flandres de espíritu perfecto. Hay amor en los padres, hay calor en las madres, hay indicios de amistad, pero también hay algo de desconfianza en el modo en que los amigos intentan describir el momento del crimen y el rol de Jesse en la escena. Violet tiene momentos muy logrados, como el que describe el rostro del protagonista en un concierto metal o el encuentro con el padre de su amigo asesinado, y que permiten minutos de ambivalencia en medio de la certeza de una ausencia.
Violet obtuvo el Gran Prix del jurado internacional en la sección Generation24plus de la reciente Berlinale, y confirma el talento de este joven cineasta que debuta en el largometraje con esta obra abrumadora sobre cómo interpretar desde otro ángulo las fracturas adolescentes.
Reparto: Cesar de Sutter, Raf Walschaerts, Mira Helmer, Koen De Sutter, Jeroen Vander Ven, Fania Sorel, Brent Minne
Guionista: Bas Devos
Productor: Tomas Leyers
Director de fotografía: Nicolas Karakatsanis
Música: Deafheaven
Editor: Dieter Diependaele
Duración: 82 minutos.