BAFICI 2016: LAS LINDAS DE MELISA LIEBENTHAL

BAFICI 2016: LAS LINDAS DE MELISA LIEBENTHAL

Por Pablo Gamba

Las películas sobre la infancia y la adolescencia se han destacado en el 18° Bafici, tanto por la cantidad como por la calidad de algunas, como es el caso de Las lindas. El documental autobiográfico de Melisa Liebenthal –nacida en 1991–, que ganó este año el Premio Bright Future en el Festival de Rotterdam, trata de cómo la búsqueda de conformidad con la mirada de los demás, y la mirada masculina en particular, puede ir definiendo la identidad de las mujeres desde cuando eran niñas y jóvenes, sin caer en los lugares comunes de la crítica de los estereotipos difundidos por la tradición y los medios de comunicación.

El comienzo trae a colación una experiencia que ha marcado la vida de la realizadora de la película: ser confundida con un hombre por lo grave de su voz, a lo que ella ha añadido una manera de vestir poco “femenina” y el gusto por llevar el pelo corto. Fue también una niña reacia a sonreír en las fotos y de adulta no ha dejado de preguntarse por la necesidad de eliminar el vello de aquellas partes del cuerpo en las que a las mujeres se exige no dejarlo crecer. Pero a la vez es consciente de que, aunque no lo parezca, la opinión de los hombres sobre la belleza femenina ha sido considerada en todas esas decisiones.

En la película se confronta el relato sobre sí misma de la protagonista con los recuerdos y experiencias de sus más cercanas amigas, a través de entrevistas y conversaciones que giran alrededor de fotos. Ellas documentan las diversas poses, y maneras de vestirse y maquillarse con las que representaron los personajes de la niña y la adolescente para el círculo íntimo de las amistades y la familia. El modo en que la cámara encuadra esas fotos y las enfoca, las integra al contexto en el que hablan los personajes. Así el carácter de evidencia de las imágenes pierde relevancia en relación con el comentario, que es lo que en este caso importa para poner de relieve la influencia de la mirada de los otros.

Además de las fotos, hay fragmentos de las cintas de video que Liebenthal grabó con su mejor amiga, quien se negó a que algunos otros fueran hechos públicos en la película. Ese ocultamiento es lo más revelador acerca del poder que puede tener la opinión ajena para la manera como cada uno define su identidad, sobre todo porque el ocultamiento no aclara qué es lo que la amiga rechaza. El miedo en general al qué dirán es lo que parece primar sobre el temor específico a ser considerada homosexual, que es la explicación más fácil que viene a la mente, aunque la secuencia inicial sea una advertencia contra las primeras impresiones.

En detalles y omisiones como esos, Las lindas descubre la trascendencia de un tema que incluso puede parecer frívolo por la manera de cómo fue tratado, relegando a segundo plano factores como la política, la pertenencia al mismo sector social e incluso la religión de los personajes. De esa manera, la película llama la atención sobre una de muchas cosas que pueden marcar la vida de una generación, y que no son el “menemismo”, la crisis de 1998-2002 y las huellas de la dictadura, en el caso de los nacidos en los noventa en Argentina.

 Competencia argentina

Dirección y guion: Melisa Liebenthal.
Producción: Eugenia Campos Guevara.
Fotografía: Lucas Pérez Soto.
Edición: Sofía Mele, Melisa Liebenthal.
Sonido: Marcos Canosa.
Música: Ángeles Otero.
Elenco: Josefina Roveta, Victoria D’Amuri, Sofía Mele, Camila Magliano, Michelle Sterzovsky, Melisa Liebenthal.
Argentina, 2016, 77 min.