Por Mónica Delgado
Hace algunos días, gracias a la iniciativa del editor peruano Víctor Ramos, se realizó la presentación en Lima de una publicación del crítico de cine y docente argentino, Hernán Sassi, en el auditorio del Centro Cultural de la Universidad de Ciencias y Humanidades. La invención de la literatura. Una historia del cine propone, a partir de sus siete apartados, una reflexión sobre la naturaleza literaria del cine. ¿Qué es lo literario en el cine? es una pregunta obligatoria para cualquier lector o lectora que se acerca al libro, y que será respondida lejos del tópico usual desde las adaptaciones o la narratología de publicaciones académicas. Es más, este es un libro que funciona como adelanto ante una siguiente investigación y publicación del autor sobre la presencia del sentido de lo literario en el Nuevo Cine Argentino.
Hernán Sassi es profesor y crítico de cine. Es Doctor en Letras y magíster en Comunicación y Cultura por la Universidad de Buenos Aires. Ha publicado Hoteles. Estudio crítico (2007) sobre film de Aldo Paparella, Cambiemos o la banalidad del bien (Red Editorial, 2019) y Perrone, el corsario (Red Editorial, en prensa). Y este reciente libro continúa una faceta ensayística y crítica en torno al cine. Como otros críticos, su abordaje parte desde la cinefilia misma, pero también desde una posición reflexiva, desde una propuesta historiográfica, entendiendo al cine como parte de una dinámica sociocultural, y no solo estética. A pesar de las 160 páginas (ya que pudieron ser más), inspiradas en el estilo del escritor Ilya Ehrenburg, Sassi nos arroja a una posibilidad de comprensión del fenómeno cinematógrafico desde una crítica al capital y su poder de alineación desde la predominancia de un tipo de escritura. Además, el libro contiene un antiprólogo del cineasta argentino Raúl Perrone, que también deviene en un estatement político.
En La invención de la literatura. Una historia del cine se desarrolla la argumentación de manera cronológica. Los primeros capítulos abordan al cine en su aparición a finales del siglo XIX, no como el nacimiento de un invento técnico ni tampoco como la efemérides de la primera proyección pública y pagada de los Lumiére sino como un mito de origen basado en el caracter narrativo que lo configura y lo introduce como mecanismo de reproducción y masificación de relatos. Así, en estos dos primeros apartados, Sassi va proponiendo este crecimiento del cine hacia la inevitable industria desde su capacidad narrativa, pasando por sus búsquedas identitarias de sus primeros años, desde el llamado cine primitivo, hasta su deslinde tras ser considerado “un arte parasitario” por parte de diversos formalistas y pensadores de la segunda década del siglo pasado, que dotaron al cine de un cariz expresivo único, sin comparación a ninguna de las otras artes. En estas primeras páginas, Sassi se detiene en dos personajes revolucionarios en el modo de construir las imágenes en movimiento: Eisenstein, influido por Pushkin, Whitman o Shelley, y Griffith, cuyos films no existirían sin Dickens. Ambos cineastas tampoco pudieron eludir la deuda literaria, aunque la transformaron.
En el tercer capítulo, Sassi describe el imperio de Hollywood como una institución que instaura la primacía de los relatos, en la medida en que la labor de los guionistas y productores se volvió primordial, en una “megafábrica de relatos”. Esta es la sección más benjaminiana, en la medida que el análisis del cine como parte de un engranaje industrial, encuentra en el reino del relato y sus guiones una variante más del análisis de la reproducción masiva y sin aura: “Bajo el dominio de los estudios, el cine volvió a tener una vida vicaria a la sombra de la literatura. […] historias bajo la dictadura del argumento y se impusieron los films de guionistas, los únicos escritores aceptados en Hollywood, o dicho de otro modo, los únicos autores de entonces” (p.69). En el cuarto capítulo está la tesis gravitante del libro, de que el cine se encuentra a sí mismo como un acto de autoconciencia de su materialidad y como lenguaje, aunque para Sassi esto también es un proceso de escritura, pero liberador y transformador. “El cine moderno no revive mansamente la literatura: la manipulará, la tergiversará y hasta la saqueará sin contemplación alguna…” (p.87). Así, Sassi describe a esta invención de la literatura como un “arcón de citas” o como “productivo núcleo de disyunción”. Para ejemplificar este punto, menciona al cine de Godard, de los Straub-Huillet, de Pasolini, Welles, Rohmer, Antonioni, Rocha o Duras. Y en los dos siguientes apartados, el autor propone otras vías críticas de la modernidad, ya sea en virtud de las nuevas formas de distribución y exhibición en tiempos de streaming, o desde un territorio específico, desde las influencias y lenguajes del Nuevo Cine Argentino y sus herederos.
Con un epígrafe inicial de Jean-Luc Godard (que alude a que el cine “nos da un relato/una historia/ y nos dice/ahora: cree”), este ensayo de Hernán Sassi propone la invención de la literatura en el cine como una práctica liberadora propia de la modernidad del cine, entendida aquí como el periodo donde coincide no solo una urgencia formal ante el avasallamiento de Hollywood y sus puestas en escena clásicas, sino también una huída ante la capitalización del cine como un objeto de consumo desde la primacía de lo narrativo. Un cine reducido a un entretenimiento de tramas o historias. Por ello, la propuesta de Sassi se vislumbra no solo por un renovado tratamiento historiográfico del devenir del cine, desde su filiación con la naturaleza de lo literario (la trama, los personajes, la dictadura del argumento), sino desde un acercamiento a la idea de la modernidad del cine, que ha estado marcada por un grupo de películas en un periodo determinado del siglo XX, por escuelas, estéticas o “autores”. Y más bien plantea los cimientos del andamiaje -porque se percibe al libro como un punto de partida- para un encuentro más profundo entre la materia literaria y la composición de la materia fílmica (en puesta en escena y montaje).
La invención de la literatura / Hernán Sassi. – 1a ed. – Vicente López : Red Editorial, 2021.
200 p. ; 22 x 17 cm.
ISBN 978-987-48379-2-9